Blog del Tercer Ciclo del Ceip. Buenaventura González de Bezana. Cantabria.

jueves, 12 de noviembre de 2009

La historia de Morgan

Hace mucho, mucho tiempo una noche de Magosta en Cantabria, uno de los ancianos más mayores contó una historia a la luz de la fogata mientras los demás comían las castañas asadas y escuchaban atentamente, sobre todo los jóvenes; Se titulaba La historia de Morgan y pasó por lo que contaba el anciano cuando él era joven. Decía así:
“Una noche de luna llena, como esta, los habitantes de Sera que era como se llamaba entonces este pueblo, subimos para celebrar el día de Todos los Santos. Como ya sabéis es la noche en la que los muertos salen del cementerio. Para cuando subimos, las casas estaban preparadas para que no entraran los muertos y no trajeran malos augurios; Había verrugonas, que son las calabazas que se colocaban iluminadas en los huertos, en los cruces de caminos y hasta en las laderas de los montes cercanos a las aldeas.
Y hacíamos muchos más rituales que casi todos se han perdido, salvo este de la Magosta y el de las calabazas. Estábamos todos sentados alrededor de la fogata como ahora. También nos estaban contando una historia cuando de repente oímos un grito. Todos nos volvimos hacia el bosque de donde salía. Como no sabíamos que era, teníamos miedo, los adultos para calmarnos nos dijeron que seguramente sería un animal. Nos tranquilizamos al pensar en que era un animal pero… oímos unas palabras: ¡SOCORRO¡ ¡NO SE DONDE ESTOY¡ ¡MAMÁ, PAPÁ! ¡¿DÓNDE ESTÁIS?! ¡SOCORRO! Entonces supimos que no era un animal, claro estaba, era la voz de nuestra amiga… Morgan. Sus padres la dijeron que no hiciera tonterías. Y volvió a gritar. ¡SOCORRO¡ ¡AYUDADME¡ Morgan era más pequeña que yo, ella tenía ocho años y yo once. Nos dimos cuenta de que no estaba y no se veía ninguna sombra. Era verdad. Todos nos pusimos a buscarla, íbamos de cada tres niños con un adulto. La buscamos por todas partes. Peinamos el bosque sin ningún resultado de la búsqueda, entonces oímos un grito de dolor, ya la dimos por pérdida.
Y no voy a decir cuenta la leyenda, porque no es una leyenda es un hecho real, todas las noches del día de Todos los Santos, en la Magosta, Morgan sale, con todos sus ropajes hechos jirones, por los árboles que cobran vida a las doce en punto de la noche e intentan matar a los que pasan por allí. Muy pocos, porque a esas horas nadie está por el bosque sin una gota de luz. Morgan sale cuando dan las doce campanadas en la iglesia. A la primera campanada, se prepara, a la tercera está en camino, a la quinta está a medio camino y a la octava está al acecho. A la duodécima sale y da un susto de muerte, coge a unos cuanto niños y se los lleva… No se sabe para qué. Dieron la primera campanada, todos los niños se fueron con sus padres, a la tercera estaban todos acurrucados lo más lejos posible del bosque, a la quinta algunos empezaron a llorar del miedo que tenían, a la octava algunos gritaban: Mamá, papá vámonos. Y a la duodécima escucharon algo y de repente salió Morgan con sus ropajes hechos jirones. Los padres estaban intentando proteger a sus hijos, pero era imposible, Morgan se llevó a tres niños. Los padres lloraban la pérdida de sus hijos, mientras que los niños gritaban ¡SOCORRO! Y se les oía llorar.
Sus amigos les fueron a buscar y les encontraron. También vieron a Morgan, algunos tenían mucho miedo. Los padres se encontraron entonces con Morgan, su ropa era como había contado el anciano. Los padres recogieron a sus hijos que estaban un poco heridos. Morgan intentó explicar porque hacía eso, pero los padres la apresaron, y la llevaron a la cárcel del pueblo.
La verdad es que Morgan tenía la cara dulce pero en sus ojos había un poco de maldad. Si la hubieran dejado explicarse, y la hubieran dado cariño, ella volvería a ser buena. Pero como no lo hicieron, Morgan sigue teniendo que coger a unos cuantos niños para que sufran como ella sufrió. Puede ser cualquiera de nosotros, ahora en cualquier noche, porque como Morgan murió en la cárcel, tiene todavía más rabia y más maldad. Así que vosotros los que habéis leído o escuchado la historia, cuidado por la noche. Y además si estás en el bosque después de las doce y no estás dormido di adiós a todo el mundo porque… Morgan te atrapará en una pesadilla y no podrás salir de ella…”
Paula del Río

No hay comentarios: